Una mujer acaba de dormir a los niños
y con paso delicado atraviesa
la única habitación de la casa hacia el calentador
pone a hervir agua en un jarro enlozado,
estira su mano hacia la lata azul
abre el té de jazmín y aspira.
también este dolor pasará
las burbujas ascienden con el calor
y ella cuida el agua
la respiración acompasada de los hijos
el menor tuvo tos
bebemos té para olvidar el ruido del mundo
las hojas se despliegan
otra mujer las escogió en la penumbra
de un tostadero de Ceilán,
también su hijo dormía
ahora bebe su té
el vapor ha empañado el vidrio de la ventana
el cuerpo cansado
agradece
en el fondo una flor blanca descansa.
de Kasu, apuntes sobre el té (inédito)
Comentarios
Publicar un comentario