hamacas / gabriel martino |
Impulsa
su autito de carrera sobre el asiento que con el oleaje recorre el largo de la
lancha, rebota y cae sobre las piernas de un hombre adormecido.
El niño
recibe un reto suave y la madre musita una disculpa.
Pero
el hombre ha sido tocado.
Ve
la puerta de alambre, la cocina, el cajón de los cubiertos.
Esquiva
los cuchillos y guarda tres cucharitas de metal, sacachispas.
Clava
la cuchara en la masilla
clava
la masilla en el plástico
Impulsa
su autito de carreras
El
niño que dormía, despierta.
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